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hola, buen día ¡felices vacaciones!
las vacaciones siempre caen bien
ya sea que viajemos a otro lugar, que nos mantengamos cerca de casa, o bien en nuestro habitual entorno, transitar por el periodo vacacional siempre nos da el regalo inicial de la alegría, y esto ¡ya es muy bueno!
en esta etapa, todo parece transcurrir más ligero, es como una tregua a las presiones globales y personales, y esto es debido a que la mayoría de las personas no están concentradas en ciertos temas y esta ausencia de “foco/focus” produce un alivio de presión en la tensión global
en otro nivel de acercamiento, es debido a que simplemente nosotros salimos de ese mundo cargado
(salimos hacia el mundo de las vacaciones y nuestra mente está en un sitio más tranquilo)
(más sutil: ciertos pensamientos son los que se van de vacaciones y no sobre cargan la atmósfera)
[nota: los pensamientos impregnan]
como algunos de los pensamientos (las conciencias) dan a luz un sitio más pacífico, entonces se “respira” una amigable atmósfera de vacaciones
(cuidado, por favor recordar que las diversas fuerzas espirituales, no están de vacaciones)
{mejor continuemos} esta pausa es muy útil y la podemos aprovechar para afinar nuestras percepciones (hay relajación, entonces podemos recibir mejor)
podemos observar mejor,
más sencillo: hay la posibilidad de simplemente ver (admirar, disfrutar, reconocer)
¿alguna sugerencia?
es recomendable ver, sobre todo el vecino de enfrente (el prójimo, el ser cercano, familiar, amigo, empleado, ciudadano …)
hay que hacer un esfuerzo para simplemente ¡verlo!
(no es exageración vacacional, los momentos que producen más oscuridad y daño en nuestra historia espiritual <personal, comunitaria, económica, política, social> son cuando no se ve al prójimo, el vecino de enfrente)
hay que realizar un esfuerzo, y verlo
y en la medida de lo posible, tratar de observar que posee una chispa divina a ser reconocida, respetada, elevada
(lo bueno es que en muchos lugares vacacionales hay abundante luz solar y reflejantes)
(de igual forma en las ciudades y habitaciones hay luces todavía por doquier)
(y una inocente pregunta ¿para qué nos sirve tanta luz? desde bioconciencia es simple: para ver mejor, esencialmente ese spark, esa chispa divina en cada humano)
asimismo, las vacaciones ofrecen las pruebas intensas de la convivencia (¡hay que aprovecharlas!)
también hay valiosos momentos para ejercer el compartir, la caridad y el regalo espiritual de valorar lo recibido, las inmensas riquezas que administramos (y las que no administramos)
con ayuda del Creador, las vacaciones pueden recordarnos dónde habita la esencia de nuestras vidas, así como nos pueden brindar el vigor para dirigir mejor nuestros pensamientos (hacia lugares más elevados)
ver al prójimo (y su spark) es muy bueno,
reconocer lo espiritual trae paz
jaime kurt
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